maquito

martes, enero 23, 2007

TARDE O TEMPRANO


A los pobres les consuela la esperanza, y hasta se podría decir que es la razón de sus vidas.
Ellos se pasan la vida entera esperando y a los demás qué les importa: "son pobres pues, qué vamos hacer", dicen y siguen su curso.

Una de las frases que los pobres suelen decir para consolarse y aliviarse de tan injusto destino es: "tarde o temprano".

"Tarde o temprano se terminará esta situación", "tarde o temprano se compondrá mi vida", "tarde o temprano tendré dinero y saldré de la pobreza", etc., etc., ... etc.
Y la verdad es que pasan los años y su situación nunca cambia, sino por el contrario, empeora. Tal parece que ser pobre es una maldición, que ni las probabilidades ni el azar parecen darle mucha chance.

A pesar del sufrimiento, llegan todavía a decir: "la esperanza es lo último que se pierde", y mueren sin que su esperanza se concrete.

En la batalla por el crecimiento, yo creo que la esperanza no es buena aliada, sino más bien la confianza y fe en sí mismo, así como la inteligencia para saber enfrentar los desafíos que pone la vida en ese camino.
El éxito o los triunfos son relativos, lo que cuenta es el crecimiento como persona y la satisfacción interior de ser, hacer y saber estar.

Qué bueno sería poder decir con seguridad, antes de morir: Soy.

miércoles, enero 10, 2007

LA AMISTAD


Hoy quiero hablar de la amistad, pero no de esa aparente, falsa e interesada; sino, de esa auténtica que no irradia hipocresía.
De ella quisiera decir todo el tiempo, que es mi alegría, mi bendición, mi tesoro, mi razón de seguir adelante, aún con dificultades.
De ella quisiera decir su nombre, pero: ¿cómo reconocer la verdadera amistad cuando la tienes enfrente y no dice nada?
Por fortuna la verdadera amistad, puede estar en cualquier parte.

miércoles, enero 03, 2007

IDEAS IMPROBABLES

Cada día ven menos mis ojos y mis ideas improbables son más, pero no siento cólera, igual avanzo tratando de robarle al tiempo algo más de su alimento para mi vida. Sin embargo, no me aferro a la vida, vivo sin engaños metido en tiempos posmodernos donde mutilan la palabra y ensalzan la imagen. Quieren matar la palabra, pero ella tiene magia y nunca morirá.

Pero hablemos de mis ideas improbables que tal vez otros harán probables:

1. Vidrios autolimpiables, que no necesitan mantenimiento y siempre permanecen limplios.
2. Réplicas de moscas, vigilando el tráfico aéreo de los aeropuertos.
3. Saber cómo se comunican las bacterias y usarlas para sanar enfermedades.
4. Cerveza sintética en polvo al alcance de todos.
5. Un microchip vivo, capaz de adaptarse a cualquier situación y controlar el envejecimiento de las células.
6. Disposito electrónico, capaz de medir y saber la vida interna de una persona.

Siento cómo el viento golpea mi espalda, pero para qué voltear, si ya conozco lo que dejé atrás.